Representantes sindicales de la Alternativa Democrática, organización de la cual forman parte la CTV, Codesa, CGT y Unete, se reunieron con el embajador Mauricio Dorfier, director de Asuntos Políticos y Defensa de la Unasur, para manifestar su preocupación por lo que ocurre hoy en Venezuela.
A la reunión asistieron Fernando Ibarra, presidente de la CEDOC-CLAT; Marcelo Solórzano, presidente de la Confederación Ecuatoriana de Trabajadores del Sector Público (Cetespe) y Jaime Arciniega Aguirre, presidente de CSE-Ecuador.
Arciniega detalló que en la reunión, los sindicalistas manifestaron la preocupación que existe por parte de las 20 organizaciones sindicales que conforman la AD, debido a la situación política económica y social por la que atraviesa Venezuela. “Se hizo énfasis sobre las precarias condiciones sociales, producto del desabastecimiento de alimentos, útiles de aseo personal, medicinas, el desmejoramiento de los servicios públicos, entre otros, que sufre la población venezolana y que no podemos ser indiferentes frente a estas realidades”, continuó.
El sindicalista señaló que en relación a la representación de los trabajadores en cuanto a su autonomía, existe, al igual que en Ecuador, la intromisión del Gobierno en la vida interna de las organizaciones sindicales, acción que está prohibida por la constitución de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).“Lamentamos y demandamos respeto por esto tipo de actitudes, pues el Gobierno venezolano utiliza organizaciones que son afines con sus intereses tomándose la representación de los trabajadores y desentendiéndose con la autonomía y la libertad de asociación garantizada por los convenios 87 y 98 OIT”, denunció.
Arciniega recalcó que en el marco político, reconociendo la soberanía y la autodeterminación de los pueblos, manifestaron su preocupación por los conflictos generados desde el Gobierno frente al referéndum revocatorio, ya que se pretende dilatar y crear mayor conflicto siendo este un derecho ciudadano permitido por la Constitución de Venezuela.
“Si bien somos respetuosos de la soberanía del Estado venezolano, no es menos cierto que la comunidad internacional no puede mostrarse indiferente a estas realidades del hermano país y las 20 organizaciones sindicales de las Américas, aglutinadas en AD, nos ponemos a disposición para prestar nuestro contingente para que, dentro del marco constitucional, prospere la instalación de mesas de diálogo social, se logren superar las diferencias y consolidar la democracia”, señaló.
Los sindicalistas resaltaron ante el representante de Unasur la necesidad de alentar la participación de la OEA en el problema político y que ambas organizaciones manifiesten un interés mayor para superar estas diferencias que afectan la convivencia ciudadana, la paz y la democracia.
Según detalló el representante de la AD, el director de Asuntos Políticos y de la Unasur saludó la iniciativa de AD y manifestó que, al igual que las centrales sindicales del continente, el Secretario General de Unasur, Ernesto Samper, ha manifestado su preocupación por lo que sucede en Venezuela desde el proceso electoral de diciembre los que salió victoriosa la oposición y manifestó que la organización es respetuosa en reconocer el espíritu y el resultado de las mismas, pues no dudan de la legitimidad y legalidad de la voluntad popular y por tal el reconocimiento de la bancada de la oposición, así como la del presidente elegido constitucionalmente, Nicolás Maduro.
“Sobre la participación de la OEA en el conflicto político, el embajador de Unasur señaló ser respetuoso de la institucionalidad de cada organización y, por tanto, valora que cada institución tome su iniciática y haga esfuerzo para ayudar en la solución de los conflictos”.
El representante de Unasur manifestó por su parte que, si bien la Unasur tiene la predisposición de ayudar a establecer un diálogo en el país, pero el tema de las decisiones en el marco político le corresponde al pueblo resolverlo por la vía que le permite la Constitución y la voluntad popular, enmarcada en el respeto al derecho y la democracia. Sin embargo, tomó como positivo que la AD manifestara su voluntad de ayudar en el establecimiento de las mesas de diálogo y recomendará que se realice también con empresarios, la academia, sociedad civil organizada, grupos de mujeres, entre otros.
“Señalamos que las mesas de diálogo, en relación a los trabajadores, deberían mantenerse con todas las centrales sindícales y no únicamente con las que son afines al Gobierno, como pasa recurrentemente con la representación de los trabajadores en las conferencias de la OIT, que asisten en calidad de delegados principales relegando la legítima representación de las demás centrales sindicales venezolanas, pues así no podría mantenerse un dialogo social legítimo, frontal y sincero”, continuó Arciniega.
El representante de la AD detalló que el embajador tomó nota de todo lo referido en la reunión y aseguró que no duda que el Secretario General de la Unasur acogerá con agrado la propuesta de la organización sindical. Además, acotó que estará en contacto con los representantes de Ecuador para informar sobre los avances en este propósito
NDP
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