En el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, Fernando Villarejo testificó. Villarejo fue jefe de Terapia Intensiva en la clínica donde operaron al astro. Declaró que Leopoldo Luque y Agustina Cosachov lo presionaron. Los médicos imputados solicitaron sedar profundamente al exfutbolista durante 24 horas. Villarejo afirmó haber estado en total desacuerdo con la indicación.
El juicio busca determinar la culpabilidad de siete profesionales de la salud. Se les acusa de homicidio simple con dolo eventual por la muerte de Maradona en 2020. La declaración de Villarejo se produjo en el Tribunal Oral en lo Criminal N.º 3 de San Isidro. El médico recordó el ingreso de Maradona en noviembre de 2020.
Villarejo aseguró que la petición era sedar al paciente. Maradona estuvo ingresado en la Clínica Olivos por un hematoma subdural. El jefe de Terapia Intensiva expresó su negativa inicial en la reunión médica. Sin embargo, finalmente acató la indicación. Sedó al exfutbolista como parte de un proceso de desintoxicación.
El médico explicó que la sedación duró 24 horas. Consideró que un proceso de abstinencia requería un tratamiento más prolongado. Ante la falta de un plan claro, decidió disminuir la dosis. Villarejo sintió la responsabilidad ante cualquier eventualidad. Insistió en la necesidad de un equipo multidisciplinario.
Villarejo también se refirió al traslado de Maradona a una internación domiciliaria. Su recomendación fue un centro de rehabilitación con personal especializado. Ante la negativa de Luque, respetó la decisión. En el juicio se juzga a otros profesionales de la salud por la muerte del ídolo argentino.
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