El 25 de agosto del 2012, se precisó una exagerada explosión en Amuay que ocasionó alrededor de 50 muertos y más de 100 heridos, en ese momento las autoridades competentes declararon que se trató de un sabotaje, pero muchos políticos e investigadores asumen que para el momento hubo una desinversión de 78% en mantenimiento, además se había dado una alerta por un mal funcionamiento en la planta.
Amuay, una refinería que se encuentra ubicada en Falcon, opera en la actualidad con una capacidad de 54% según reseña Notirápida. Este es el craqueador más grande del país, con capacidad de producir 108 mil barriles de gasolina diarios, comprometiendo aún más la grave situación de producción de gasolina, sus componentes, gas y alquilatos.
Los habitantes de Judibana, Creolandia y otras zonas aledañas a la refinería salieron de sus casas aterrorizados por el estallido. El martes 28 de agosto luego de cuatro días, las llamas fueron extinguidas en su totalidad. En la actualidad, aún se levantan denuncias porque tras cuatro años de haber ocurrido esta atrocidad no se hallan responsables del hecho.
“De ser emblema en el mundo, quedaron para recibir productos importados como gasolina, gasoil, componentes. Es bastante lamentable que no se hayan hecho los correctivos”, afirmó un sindicalista de la empresa.
Fuente: Infoenlace con Información de Notirápida
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