Los vapers, también conocidos como cigarrillos electrónicos, son cada vez más populares, especialmente entre los jóvenes. Sin embargo, aunque se consideran una alternativa más segura al tabaco, los expertos advierten que su uso puede ser peligroso para la salud.
Según un estudio publicado en la revista Nicotine & Tobacco Research, los vapers son más propensos a sufrir problemas respiratorios y a desarrollar enfermedades crónicas que los no fumadores. Además, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el vapor de los vapers contiene sustancias químicas tóxicas y carcinógenas, como el formaldehído y el acetaldehído, que pueden causar cáncer.
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Los expertos también están preocupados por la adicción a la nicotina que pueden causar los vapers. Según el Dr. Stanton Glantz, director del Centro de Investigación y Educación sobre el Tabaco de la Universidad de California, “los vapers son una puerta de entrada a la adicción a la nicotina, especialmente entre los jóvenes”.
Además, según un informe de la Academia Estadounidense de Pediatría, el uso de vapers entre los jóvenes ha alcanzado niveles epidémicos en los últimos años. Según el informe, el 25% de los estudiantes de secundaria en Estados Unidos ha usado vapers en los últimos 30 días.
En resumen, aunque los vapers se consideran una alternativa más segura al tabaco, su uso puede ser peligroso para la salud debido a los problemas respiratorios, la exposición a sustancias químicas tóxicas y la adicción a la nicotina que pueden causar. Es importante que se tomen medidas para reducir el uso de vapers, especialmente entre los jóvenes, y se promueva una mayor conciencia sobre los riesgos para la salud asociados con estos dispositivos.
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