Nicolás Maduro expresó su deseo de que un juez en Estados Unidos tomara una decisión a favor del regreso a Venezuela de Maikelys, una niña de dos años. El gobierno venezolano insistió en que la niña fue separada de su madre antes de subir a un avión para volver al país desde Estados Unidos. Maduro habló sobre este tema en su programa de televisión semanal.
Maduro también dijo que Venezuela estaba lista para ir a buscar a la niña, sin importar dónde estuviera. Él cuestionó por qué separaron a una niña tan pequeña de su madre y preguntó si la acusarían de algo relacionado con el Tren de Aragua. Maduro rechazó lo que él consideró una historia falsa y manipulada contra Venezuela.
Yorely Bernal, la mamá de Maikelys, dijo que confiaba en que el gobierno de Maduro lograría que su hija volviera a Venezuela. En declaraciones a los medios, Bernal afirmó que no tenía problemas con la ley ni en Venezuela ni en Estados Unidos. Raida Inciarte, la abuela de la niña, aseguró que tenía documentos que demostraban que la niña podía salir de Estados Unidos sin problemas.
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela ordenó que Maikelys regresara al país de inmediato. El TSJ explicó que la niña estaba retenida en Estados Unidos sin razón y lejos de su familia. Por eso, el tribunal tomó una medida para que la niña se reuniera con su mamá.
El TSJ le pidió a la oficina encargada de las relaciones con otros países que usara todas las formas posibles (legales, políticas, de diálogo y con otros países) para asegurar que la niña volviera sana y salva a su familia en Venezuela.
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