El cáncer colorrectal es una enfermedad que afecta en la mayoría de los casos a personas con edades superiores a 50 años, pero los jóvenes no están exentos de afrontarla. Esta patología se ubica como el quinto tipo de cáncer más frecuente en Venezuela, detrás de los de mama y próstata, cuello uterino y pulmón.
Así lo afirmó la doctora Rosalba Casanova, médico gastroenterólogo del Grupo Médico Santa Paula (GMSP), quien señaló que “sí se presentan algunos casos en jóvenes, sobre todo cuando hay antecedentes familiares de cáncer de colon, o antecedentes de poliposis familiar, así como padecer de patologías crónicas como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn”.
Indicó que los principales síntomas de cáncer colorrectal “se asocian a la aparición de sangre en las heces, cambios en la frecuencia evacuatoria, tenesmo rectal (se tiene la necesidad de evacuar pero no se logra), y dolor en la pelvis”.
Explicó que, según el reporte Globocan de la Organización Mundial de la Salud, para 2020, se reportaron 19,29 millones de nuevos casos de cáncer, de los cuales cerca del 10% corresponden a neoplasias (masas anormales de tejido) de colon y recto, viéndose más afectado el sexo masculino.
Así mismo, las cifras aportadas por la Sociedad Anticancerosa de Venezuela, dan cuenta de un incremento en los nuevos casos de cáncer colorrectal con respecto a años anteriores, situándose para 2020 en un 14,31 % en hombres y de 13,18 % en mujeres, acompañado de un alza de la mortalidad por esta causa.
Diagnóstico y prevención
Casanova resaltó que, el cáncer colorrectal en estadio precoz es susceptible de ser identificado mediante la oportuna realización de la colonoscopia y ser tratado a su vez a través de resección endoscópica. Para los casos avanzados la alternativa de tratamiento generalmente es cirugía combinada con quimioterapia y radioterapia.
En este sentido, “es muy importante contar con equipos de última generación en manos del equipo de profesionales calificados como los del GMSP, que permitan identificar y retirar adecuadamente las lesiones”, subrayó la especialista.
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Agregó que el cáncer colorrectal se puede prevenir cultivando hábitos de vida saludables como tener una dieta baja en grasas, carnes rojas, procesadas o muy cocinadas. “Es recomendable un alto consumo de fibras, frutas, legumbres, vegetales; así como la realización frecuente de ejercicio físico. Es necesario evitar la obesidad, no fumar y moderar el consumo de alcohol”, comentó.
Asimismo, indicó que a partir de los 45 años, las personas deberían realizarse anualmente una colonoscopia y una prueba de sangre oculta en heces de última generación (Test Inmunológico) en pacientes asintomáticos. “Cuando hay antecedentes familiares los estudios deben hacerse a edades más tempranas entre los 35 y 40 años”, acotó.
Destacó que la Unidad de Gastroenterología del GMSP en alianza con la Sociedad Anticancerosa, dirige las acciones de promoción y cuidado de la salud digestiva. El departamento está conformado por gastroenterólogos de trayectoria y amplia experiencia, apoyados en un equipo de anestesiólogos e instrumentistas endoscopistas”.
Con información de Lic. Leonisia Cusati N.
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