El Laboratorio Nacional de Oak Ridge, en Tennessee, avanza en la producción de combustible nuclear avanzado para impulsar una nueva generación de energía nuclear en Estados Unidos. La empresa X-energy está fabricando pequeñas esferas de combustible TRISO, conocidas como “guijarros”, que contienen uranio enriquecido a niveles superiores a los usados en las plantas actuales. Este combustible es reconocido por su alta resistencia y seguridad, y es clave para los reactores avanzados que el país proyecta tener operativos hacia 2030.
El presidente Donald Trump estableció la meta de cuadruplicar la producción doméstica de energía nuclear para los próximos 25 años, firmando órdenes ejecutivas para acelerar el desarrollo del sector. Por ello, X-energy está construyendo un complejo de casi 2.000 millones de dólares en Oak Ridge para la fabricación masiva de este combustible, la primera instalación de este tipo en Estados Unidos en más de medio siglo. Otras empresas, como Standard Nuclear y Orano, también planean ampliar la capacidad nacional de producción y enriquecimiento de uranio.
El combustible TRISO se fabrica mediante un proceso altamente tecnológico que convierte un cóctel de uranio en pequeñas esferas recubiertas por capas protectoras, capaces de resistir altas temperaturas y condiciones extremas sin derretirse. Cada “guijarro” puede ser utilizado en varios ciclos dentro del reactor, mejorando la eficiencia y seguridad energética.
Aunque expertos señalan que la construcción de nuevos reactores enfrenta desafíos económicos y de tiempo, la expansión de la producción nacional de combustible nuclear es fundamental para asegurar la independencia energética de Estados Unidos y apoyar su transición hacia una matriz energética más limpia y sostenible.
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