China instó este domingo a Estados Unidos a “suprimir completamente” los aranceles recíprocos impuestos entre ambas naciones. Esta petición se produjo después de que Washington anunciara una exención arancelaria para teléfonos, ordenadores y otros productos electrónicos. Las dos economías más grandes del mundo se encontraron inmersas en una confrontación arancelaria desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este mes aranceles globales significativos, alcanzando el 145% para productos chinos, a lo que China respondió con aranceles del 125%.
Un portavoz del Ministerio de Comercio chino emitió un comunicado en el que afirmó: “Instamos a Estados Unidos (…) a dar un gran paso para corregir sus errores, suprimir completamente la práctica incorrecta de los aranceles recíprocos y volver al camino correcto del respeto mutuo”. Inicialmente, los aranceles de Trump provocaron una notable caída en los mercados globales, lo que llevó al presidente a anunciar una prórroga de 90 días para la mayoría de los países, aunque China quedó excluida de esta medida.
Sin embargo, Washington moderó nuevamente su postura el viernes cuando el servicio de Aduanas estadounidense comunicó que teléfonos inteligentes, computadoras portátiles, chips de memoria y otros productos tecnológicos serían excluidos de los aranceles globales. El Ministerio de Comercio de China calificó estas exenciones como un “pequeño paso” por parte de EE. UU. y señaló que China estaba “evaluando el impacto” de esta decisión, según informó AFP.
Los anuncios de Washington beneficiaron a importantes empresas tecnológicas estadounidenses como Nvidia, Dell y Apple, esta última fabricante de iPhones y otros productos de alta gama en China. Datos de la aduana estadounidense indicaron que los artículos exentos representaban más del 20% de las importaciones provenientes de China. A pesar de estas exenciones, los semiconductores aún podrían estar sujetos a aranceles específicos.
El presidente Trump declaró el sábado que el lunes ofrecería una respuesta “muy específica” sobre posibles beneficios futuros para el sector de los semiconductores. El Ministerio de Comercio de Pekín también declaró que los aranceles de Trump “no solo no han resuelto ninguno de los problemas de Estados Unidos, sino que han socavado gravemente el orden económico y comercial mundial”.
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