Hace cuatro años, durante su juramentación Donald Trump habló de “carnicería americana”. Este miércoles 20 de enero del 2021, el tono fue distinto. Joe Biden, el veterano demócrata que ha recorrido una larga carrera y prolífica carrea política, habló de unidad y reconciliación.
El arraigo de los estadounidenses por las tradiciones envolvió ayer la ceremonia de toma de posesión de Joe Biden como presidente de un aura de normalidad tan necesario como extraordinario. El escenario, las escalinatas del Capitolio asaltadas hace dos semanas por una turba de insurgentes, fue a la vez el recordatorio silencioso del dramático contexto en que el demócrata llega a la Casa Blanca.
“Yo, Joseph R. Biden, juro solemnemente que ejerceré fielmente el cargo de presidente de Estados Unidos y, con lo mejor de mi capacidad, preservaré, protegeré y defenderé la Constitución”, juró al filo de las doce del mediodía, hora local de Washington. El país respiró al fin. Instantes antes, Kamala Harris hacía historia al convertirse en la primera mujer -negra y de origen indio- en asumir la vicepresidencia.
PUBLICIDAD
La democracia es preciosa. La democracia es frágil. Y a esta hora, amigos, ha prevalecido”
“Hoy es el día de la democracia (…), Estados Unidos ha sido puesto a prueba de nuevo y ha estado a la altura”, arrancó Biden. “Hemos aprendido de nuevo que la democracia es preciosa. La democracia es frágil. Y a esta hora, amigos, la democracia ha prevalecido”, celebró el 46.º presidente de EE.UU. En este “momento histórico de crisis y desafíos”, reivindicó, “la unidad es el camino que debemos seguir” para no fallar.
Acabamos esta guerra incivil: rojo contra azul, rural contra urbano, conservadores contra progresistas”
La seguridad, para alivio de todos, no fue noticia. Todo transcurrió de acuerdo al programa. La ceremonia comenzó a las once la mañana y, a pesar la distancia entre las sillas de los invitados, un millar en lugar de 250.000 como los últimos años, mantuvo la mezcla de solemnidad y cultura pop que caracteriza a estos actos. El resultado, visto por televisión, no fue muy distinto a otros relevos presidenciales.
Joe Biden anunció la suspensión por 100 días de las deportaciones de inmigrantes
El Gobierno de Joe Biden anunció este miércoles por la noche una suspensión de 100 días de las deportaciones de inmigrantes, aunque con algunas excepciones, según un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
“Durante 100 días, a partir del 22 de enero de 2021, el DHS suspenderá las deportaciones de ciertos no ciudadanos cuya deportación haya sido ordenada”, detalló el secretario interino, David Pekoske, recién nombrado por Biden.
La razón, dijo Pekoske, es “garantizar” que Estados Unidos tenga “un sistema migratorio justo y eficaz centrado en proteger la seguridad nacional, la seguridad fronteriza y la seguridad pública”, por lo que ordenó “revisar y reiniciar” los protocolos.
El DHS no aportó en el comunicado detalles sobre las personas que quedan excluidas de la medida de los 100 días.
Durante la campaña, Biden ya se comprometió a esta suspensión de las deportaciones aunque en ese entonces lo hizo sin excepciones.
Biden adquirió este compromiso después de recibir duras críticas durante las primarias demócratas por las deportaciones masivas del Gobierno de Barack Obama, del que él fue vicepresidente.
Durante la Presidencia de Obama fueron deportados tres millones de inmigrantes, más que con ningún otro gobierno de EEUU, incluido el de Donald Trump.
La pausa por 100 días de las deportaciones se suma a otra medida anunciada este miércoles por el DHS: La suspensión a partir las inscripciones al programa “Permanezcan en México”, que permitió a Trump devolver al país vecino a los solicitantes de asilo.
Además, Biden ha aprobado una serie de medidas migratorias dentro del paquete con 17 órdenes ejecutivas que ha firmado tras instalarse en la Casa Blanca, como el refuerzo del programa para jóvenes indocumentados conocidos como “dreamers” o “soñadores” o la revisión de las prioridades a la hora de arrestar a inmigrantes sin papeles.
Asimismo ha presentado un plan migratorio que prevé regularizar a 11 millones de indocumentados, aunque ese proyecto depende del Legislativo.
En presencia de la prensa y sentado en el Despacho Oval mientras llevaba una mascarilla, Biden firmó las primeras 3 órdenes ejecutivas de un total de 17: la primera para pedir a los estadounidenses que lleven tapabocas en todas las propiedades federales, la segunda para ayudar a comunidades marginadas y la tercera para devolver a EE.UU. al Acuerdo de París.
Esa orden ejecutiva sirve para reafirmar el compromiso de Washington con el Acuerdo de París, del que EE.UU. se retiró oficialmente el 4 de noviembre del año pasado, solo un día después de las elecciones presidenciales y sin que se conociera todavía si el vencedor era Biden o Trump.
Diecisiete acciones ejecutivas para empezar.
Con apenas unas pocas horas en el cargo de presidente de Estados Unidos, Joe Biden firmó 17 decretos y directivas para poner en marcha su promesa de revertir con urgencia los cuatro años de políticas de Donald Trump.
Una muestra de que Biden no quiere perder tiempo para encarar las crisis del país es que Trump, en comparación, firmó ocho órdenes ejecutivas en las dos primeras semanas en la Casa Blanca, y Obama, nueve.
Biden firmó, ente otras, la orden del mandato de usar mascarillas y mantener la distancia social en edificios públicos, así como el regreso al Acuerdo de París contra el cambio climático.
Con información de:
La Vanguardia – Infobae – El Comercio – BBC
Foto: E l Comercio Perú
Deja una respuesta