Santo Domingo, 15 de abril de 2025. — La tragedia que estremeció a República Dominicana continúa generando reacciones. Familiares de una de las 231 víctimas mortales del colapso del techo de la discoteca Jet Set formalizaron una solicitud ante la Fiscalía para que los propietarios del local sean imputados por homicidio involuntario. La denuncia también incluye una posible responsabilidad del Estado por omisión en sus deberes de control y supervisión.
El desplome ocurrió en la madrugada del 8 de abril, mientras el cantante Rubby Pérez se presentaba en el establecimiento. El accidente provocó el colapso total del techo, dejando un enorme agujero visible desde el aire entre restos de aires acondicionados y generadores. La cifra oficial de fallecidos se elevó recientemente a 231, con al menos 180 heridos.
Entre las voces que exigen justicia se encuentra Zulinka Pérez, hija del reconocido cantante Rubby Pérez, quien también perdió la vida en el siniestro. Pérez calificó el hecho como consecuencia directa de la negligencia de los dueños del club nocturno.
La familia de Virgilio Cruz, otra de las víctimas, aseguró en su declaración que existen pruebas suficientes para responsabilizar penalmente a los propietarios del local, al considerar que hubo fallas graves en las condiciones estructurales y en las medidas de seguridad del recinto.
El Gobierno dominicano designó una comisión técnica integrada por expertos locales e internacionales para investigar las causas del desplome. A la par, la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones (Onesvie) sigue analizando el estado del edificio, con un informe técnico previsto en tres meses.
Por su parte, el presidente Luis Abinader expresó su respaldo a las investigaciones y reiteró su compromiso con la verdad: “Hay que saber qué pasó, por qué pasó y cómo pasó. Que se haga justicia como debe hacerse”.
La discoteca Jet Set, a través de un comunicado, informó que está cooperando plenamente con las autoridades en el proceso de esclarecimiento de los hechos.
Mientras tanto, las muestras de solidaridad con las víctimas se han multiplicado. Una misa en su honor fue celebrada este domingo en el municipio de Haina, donde familiares, allegados y altos funcionarios del Gobierno se reunieron para rendir homenaje a los fallecidos.
Este evento ya se posiciona como una de las mayores tragedias registradas en espacios de entretenimiento del país, marcando un antes y un después en la regulación y supervisión de recintos públicos.
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