Indira Fernández, alcaldesa de Guajira, estado Zulia, fue detenida el miércoles 2 de abril por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional. Su arresto se enmarca dentro de la Operación Catatumbo, una iniciativa dirigida contra mafias en la frontera occidental de Venezuela, que también ha implicado a varios líderes y funcionarios del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Fernández, de 51 años, es psicóloga de profesión y madre de tres hijos.
Asumió la alcaldía de Guajira en 2018, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo en el municipio. Es militante del PSUV desde al menos 2012 y llegó al poder tras ser promovida por Aloha Núñez, entonces ministra de Pueblos Indígenas, una figura clave en la política regional.
La red de apoyo que propulsó a Fernández también está relacionada con la alcaldesa de Jesús María Semprún, Keyrineth Fernández, quien fue arrestada en 2022 con siete panelas de droga, lo que ha generado sospechas sobre la conexión entre ambas.
Además de Indira Fernández, autoridades detuvieron a otros funcionarios, incluyendo a Alí Fernández, director general de la alcaldía, Alexander Beltrán, director de la Policía Nacional Bolivariana en Guajira, y Caterina González Mapari, jefa del peaje fronterizo de San Rafael de Paraguachón. Todos ellos están siendo investigados por presuntos actos de corrupción relacionados con el manejo de recursos de peajes y su posible vinculación con una red de narcotráfico que opera desde Colombia hacia Estados Unidos, atravesando el Catatumbo y el lago de Maracaibo.
Deja una respuesta