A los opositores y críticos de Juan Guaidó, les exhorto a reflexionar un poquito y pensar en cual debe ser su actitud y respuesta ante el venidero fraude del 6D. La única fortaleza de oposición que tenemos, para bien o para mal, nos guste o no nos guste, se llama Juan Guaidó.
Su fortaleza viene de su liderazgo sereno, valiente y firme. Del apoyo de la asamblea nacional, del casi unánime respaldo de la comunidad internacional y por supuesto, de los venezolanos que lo apoyamos.
¡Esa oposición está a punto de convertirse en clandestina! No es momento de malcriadeces, individualidades ni pataletas. Tampoco es el momento de comportarse como un vengador, desatando como es costumbre la ira en contra de López, Capriles, Ramos Allup , Borges, etc. bajo el pretexto chavista de ser los culpables de esta tragedia.
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