La afluencia de temporadistas por la vía El Palito-Puerto Cabello es considerable. Sin embargo no son muchos los vehículos aparcados frente a las tradicionales ventas de empanadas del sector.Los propietarios y dependientes de los negocios de comida manifiestan que las ventas han disminuido de forma considerable si lo comparan con temporadas anteriores.
Tampoco los restaurantes ubicados en las adyacencias de reconocidas playas en la costa carabobeña han sido muy visitados durante el asueto de carnaval. En ambos casos los propietarios y dependientes de los negocios de comida manifiestan que las ventas han disminuido de forma considerable si lo comparan con temporadas anteriores.
Aixa Peña quien regenta un puesto de venta de empanadas en El Palito, comentó que “los carros pasan de largo” y no llegan al negocio. Cree que debido a la situación económica que todos vivimos, los vacacionistas que viajan hacía las playas van apertrechados con comida y bebidas y son muy pocos los que se detienen a desayunar en la carretera.
“La gente sube al puerto con su comida, no es como las temporadas anteriores que antes de llegar a la playa se comían su empanadita y después seguían viaje. Sufro para conseguir y comprar los materiales para las empanadas, pero al menos con lo poco que vendo recupero la inversión y no pierdo la clientela”, comentó Peña.
Eugenio Villa, encargado de otra venta de comida en el mismo sector comentó que “desde el primer día del asueto las ventas aumentaban; ahora aunque ha pasado bastante gente son pocos los que se paran y de los que se detienen algunos compran y otros no. La verdad es que estamos trabajando para no perder el punto”, aseguró.
Una situación similar viven los comerciantes con establecimientos en las playas. Carlos Balaguer quien vende cócteles, bebidas refrescantes y cocadas, dijo que desde el sábado espera que las ventas mejoren. “Estamos esperando que la afluencia de turistas aumente pero nada que llega. Lo que se ve aquí (gente en las playas), no es ni la cuarta parte de los que se veía en años anteriores”.
Abraham García atiende un restaurante en Puerto Cabello y su testimonio no difiere de los anteriores. Lamenta que las playas no estén muy concurridas. “Yo no creo que este año la temporada sea buena para las ventas debido a la situación del país. Espero que por lo menos no tener pérdidas”.
Todo hecho en casa
Muchos de los temporadistas que decidieron disfrutar el asueto de Carnaval en las playas de Carabobo, optaron por ahorrar y llevar toda la comida y bebida a consumir y así el paseo les sea menos oneroso.
En los primeros días de asueto carnestolendo en el litoral carabobeño se podían apreciar familia preparando una parrilla. “Es un costoso un viaje a la playa, pero entre toda la familia hicimos una vaca y trajimos todo lo que vamos a consumir”, dijo Yolanda Márquez.
“Los precios están altísimos, por eso traemos todo lo que vamos a comer. Venimos en el mismo transporte pero cada quien trae sus alimentos y bebidas”, dijo Rubén Pérez.
“No queríamos quedarnos todos estos cuatro días encerrados, así que decidimos preparar todo en casa porque todo está muy caro. Queríamos disfrutar pero siempre pensando en ahorrar”, comentó Miriam Campos.
Fuente: El Universal
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