Eliminar partidos y perseguir a la disidencia es una característica fundamental de las dictaduras militaristas, por lo que el decreto de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que pretende inhabilitar a Acción Democrática (AD) y a otros partidos de la oposición que no participaron en los comicios municipales del 10 de diciembre, es la ratificación de Nicolás Maduro como un dirigente autoritario, que ejerce el poder de manera tiránica, expresa Freddy Valera, diputado de la Asamblea Nacional.
Añade que el chavismo puede aplicar cualquier aberración jurídica para inhabilitar o ilegalizar a AD, pero no podrá eliminar la estructura, la formación y la capacidad de acción de un partido con más de 75 años de historia. “Pueden hacer lo que quieran, pero AD seguirá sembrado en la conciencia y en el corazón del pueblo, porque se trata de un sentimiento, ligado a la democracia venezolana”.
El secretario general adeco en el estado Bolívar asegura que un partido no es un papel que le da carácter jurídico, sino “una estructura de hombres y mujeres, dirigentes medios y de base, que están en las calles, atendiendo a los ciudadanos, acompañándolos a resolver sus problemas y trabajando por el cambio que piden los ciudadanos. El chavismo puede atacar la figura legal del partido, pero no puede quitarle a los hombres y mujeres que lo conforman y se encargan de mantenerlo vivo”.
Considera un sin sentido que se exija una validación para los partidos que no participaron en el proceso electoral del 10 de diciembre, cuando ya estuvieron expuestos a esto a principios del 2015 y cumplieron con creces las metas establecidas por el CNE.
Siguen adelante
Valera recuerda que de confirmarse la inhabilitación del partido blanco, los que integran su estructura seguirán luchando, como ya lo hicieron sus antecesores en el pasado, porque “nadie debe olvidar que Acción Democrática surgió de la clandestinidad para luchar contra una dictadura, y la venció, por eso sabemos que también vamos a vencer esta dictadura de Nicolás Maduro”.
Destaca que el partido sigue creyendo en la vía democrática para lograr un cambio pacífico y constitucional, que permita que un nuevo presidente recupere el progreso, la productividad y la calidad de vida que gozaban los venezolanos.
El líder opositor del estado Bolívar recalca que esta no es la primera, ni la última vez que intentan acabar con AD. “Ya pasamos por la clandestinidad, nos disolvieron con decretos, y hace poco dijeron que nos freirían la cabeza en manteca, pero nadie nos va a quitar por la fuerza el apoyo y el respeto que nos hemos ganado con años de lucha de la mano con el pueblo de Venezuela”.
Fuente: NDP
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