Cualquier carabobeño que lee o escucha las cifras de muertes violentas con las que cerró este primer trimestre del año, tienen casi una única expresión: ¡ Ni en la guerra! La lista roja sobrepasa 500 casos registrados en Carabobo. Solo durante el asueto de la Semana Mayor ultimaron a 52 personas.
En enero ocurrieron 206 homicidios, febrero 180 y marzo 138, para un total de 524 muertes violentas. 85 casos más que el 2015, durante el mismo período.
Aunque este marzo registró menor cantidad de asesinatos en lo que va de año, los 14 municipios de la entidad fueron protagonistas de hechos violentos. Valencia ocupa el primer lugar con 57 casos, le sigue Diego Ibarra con 17, Guacara y Carlos Arvelo con 11 cada uno, Libertador 9, Los Guayos 8, Naguanagua 6, Puerto Cabello 5, al igual que San Joaquín, Bejuma 4, San Diego 2, mientras que en Miranda, Montalbán y Juan José Mora, uno.
El uso de armas de fuego, de acuerdo a registros de El Carabobeño, son causantes de la mayoría de los asesinatos. En el mes que acaba de terminar, 131 personas murieron a disparos. Otros tres por arma blanca y dos por heridas mortales y calcinados.
Llama la atención que 33 de los 138 casos fueron por presunta resistencia a la autoridad. Al menos 10 por resistencia al robo, cinco por robo, uno por riña, el resto por supuesta venganza y ajuste de cuentas. Siete adolescentes, tres mujeres y tres funcionarios de distintos cuerpos de seguridad fueron víctimas de la violencia. Ocurrieron cinco dobles homicidios y uno dentro del Centro Penitenciario de Carabobo.
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