La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH) condenaron este viernes el “uso excesivo de la fuerza” por parte de la policía militar en Brasil para reprimir las protestas de brasileños que exigen la renuncia del presidente de facto Michel Temer y elecciones directas.
“Instamos al Estado brasileño a redoblar sus esfuerzos para promover el diálogo y proteger el derecho a la manifestación pacífica”, dijo el representante para América del Sur del ACNUDH, Amerigo Incalcaterra, en un comunicado conjunto con la CIDH, que esta semana realiza su 162 periodo de sesiones en Buenos Aires.
#Brasil🇧🇷@ONU_derechos e @CIDH condenam uso excessivo da força durante manifestações e em operativos de segurança https://t.co/5CbmWbQIBs pic.twitter.com/isyP5wDmtg
— ONU Derechos Humanos – América del Sur (@ONU_derechos) May 26, 2017
El texto difundido destaca que el 24 de mayo , movimientos sociales y centrales sindicales convocaron a protestas en Brasilia, la capital federal del país, en las que participaron aproximadamente 35.000 manifestantes. Durante estas manifestaciones ocurrieron actos de violencia, incluyendo el incendio y el destrozo de equipamientos públicos.
Los hechos violentos dejaron al menos siete detenidos y 49 heridos, algunos de ellos graves. Algunos de ellos a causa de que la Policía Militar utilizó gases pimienta, lacrimógenos y balas de goma para reprimir la protesta, debido a un Decreto emitido por el gobierno brasileño, en el cual autorizó el empleo de las Fuerzas Armadas para la garantía de la ley y del orden en el Distrito Federal. Sin embargo, el mandato fue revocada el 25 de mayo.
Condenamos junto a @ONU_derechos todo acto de violencia en protestas y manifestaciones en Brasil https://t.co/tBzBIGPdWm
— CIDH – IACHR (@CIDH) May 26, 2017
Brasil debe garantizar legalidad, proporcionalidad y absoluta necesidad en uso de la fuerza en contexto de protestas https://t.co/tBzBIGPdWm
— CIDH – IACHR (@CIDH) May 26, 2017
“Urgimos al Gobierno brasileño que cumpla con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos. Esto incluye garantizar el derecho a la protesta y adoptar políticas públicas que tengan como prioridad el respeto y garantía del derecho a la vida, a la integridad personal y otros derechos humanos fundamentales”, urgió el relator de la CIDH para Brasil, James Cavallaro.
Por su parte, el Gobierno de facto brasileño expresó este viernes su “repudio” por las críticas “tendenciosas” emitidas por órganos de defensa de los derechos humanos de la ONU y la OEA tras recientes intervenciones policiales para reprimir protestas. Según un comunicado del ministerio brasileño de Relaciones Exteriores.
Fuente: Telesur
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